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Los retos a los que se enfrenta al sector de la tecnología sanitaria en España fueron abordados en el I Gran Foro de Salud de elEconomista.es, donde el gerente de Hersill, Óscar M. Jordán, puso voz a las empresas españolas que compiten en un entorno tan complejo como el de la tecnología sanitaria, mediante su participación en la mesa redonda dedicada a esta industria.
La importancia de la innovación fue uno de los temas destacados del debate, en el que también estuvieron presentes Pablo Crespo, secretario general de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin), y Daniel Soto, director de cuentas estratégicas para España y Portugal de Medtronic.
Para Óscar M. Jordán, una de las claves para impulsar la investigación en este ámbito en nuestro país es la potenciación de la colaboración entre distintos actores del sistema de salud: industria, hospitales y organismos de emergencias, las universidades y centros de investigación, que es donde se genera el conocimiento. “En España tenemos la potencialidad para llevar a cabo esa colaboración, algo que ya se produce en otros países desarrollados”, remarcó. A su parecer, esas sinergias entre los diferentes agentes pueden dar lugar a un círculo virtuoso que redunde en el impulso de la innovación, el fortalecimiento del tejido industrial, el desarrollo económico y la generación de empleo.
En la misma línea, Pablo Crespo destacó la importancia de que se implante una cultura de la inversión en tecnología que posicione a España como un país a la vanguardia de los cuidados a los pacientes. “No es fácil que haya empresas españolas como Hersill, que fabrican en nuestro país, porque no tenemos un entorno amigable para poder invertir en tecnología y para que sean competitivas. Les cuesta llevar sus productos al mercado español y en cambio exportan sus productos porque lamentablemente la marca España tiene más prestigio en el extranjero”, señaló.
En su opinión, “es el momento de cambiar la mentalidad y hablar de una estrategia de país que favorezca una industria local que nos haga menos dependientes de otros países como pudimos comprobar con el COVID”. Tanto él como el gerente de Hersill coincidieron también en que el sistema de contratación pública debería favorecer más a las empresas de menor tamaño.
Durante el encuentro, se puso de manifiesto la importancia del Plan INVEAT para la modernización del sistema sanitaria, aunque los participantes en la mesa redonda reclamaron también ayudas a los dispositivos que, no siendo de alta tecnología, son fundamentales en la atención a los pacientes.
Conclusiones
Como reflexión final, el gerente de Hersill expresó que el sistema sanitario debería reconocer más el valor de la industria tecnológica española. “Este apoyo es muy importante para los pacientes, para el desarrollo económico del país y para un sistema asistencial más potente”, concluyó.
Por su parte, el secretario general de Fenin reclamó una estrategia sanitaria que apueste con la inversión en tecnología, modelos de compra basados en la calidad y no en el precio, y un entorno normativo que garantice la competitividad y viabilidad de esta industria, así como por medidas como la indexación de contratos, la reducción del IVA de los productos sanitarios, promover la incorporación de la innovación y aprovechar el entorno de digitalización y los datos que genera la industria para avanzar en la transformación del sistema sanitario.
Para el representante de Medtronic, hay tres necesidades fundamentales: valentía, mediante modelos de riesgo compartido, contratos mixtos y estrategias pensadas más al largo plazo; generosidad, a la hora de compartir buenas prácticas y modelos replicables; y determinación para que se produzca un verdadero cambio.
